12/02/2014

MECENAZGO PARA LA BIOMEDICINA

Josep Esteve afirma que las inversiones filantrópicas serán claves en la recuperación.

Después de diversos años de intensos recortes, la inversión española en I+D sufrió durante el 2012 el mayor desplome de la década en gasto e investigadores, según los últimos datos aportados por el INE. Con 13.391 millones de euros, el gasto total en I+D en el 2012 supuso un retroceso de seis años, ya que es algo inferior al de 2007 (13.342 millones). Una situación que el presidente de honor de Esteve, el doctor Josep Esteve, calificó de "impropia de un país que apuesta por su recuperación económica", durante el acto de inauguración del nuevo curso en la Real Academia de Medicina, celebrado hace unos días.

Durante su discurso, Esteve incidió en la necesidad de reformar la ley actual y adoptar medidas que favorezcan las inversiones filantrópicas y el micromecenazgo como estrategias de financiación para la investigación biomédica y la atracción de talento en nuestro país. "La actual falta de apoyo a la investigación por parte del Estado constituye una amenaza para el desarrollo técnico y científico del país. Es necesario hallar nuevas fuentes de financiación que permitan iniciar y mantener proyectos, porque podemos hundir décadas de esfuerzo en pocos años de penuria", sentenció.

Con todo, advirtió que para alcanzar dicho objetivo se precisa un cambio cultural, ya que, en términos generales, "la sociedad civil cree que la contribución en la I+D+i debe ser sólo estatal y no hay una implicación ni conciencia suficientes para participar".

Para Esteve, el segundo punto crítico es el insuficiente apoyo legal y el escaso incentivo fiscal a las donaciones. Así, mientras en España las donaciones suponen una deducción del 25% en el IRPF o un 35% en el impuesto de sociedades, en Francia este porcentaje sube al 65%, "Sería bueno conseguir esta deducción y extender también las de particulares al 70% en el IRPF. También deberían contemplarse las inversiones de riesgo con componente filantrópico, es decir, aquellas que buscan una rentabilidad modesta con un objetivo social", concluyó. En este sentido. Esteve destacó la captación de inversión privada que la Generalitat favorece mediante la Fundació Catalana per a la Recerca i la Innovació, así como el papel de las fundaciones y de otras instituciones sin ánimo de lucro como la Fundació Cellex o la Fundació i Obra Social de la Caixa, entre otras.